Este jueves se reveló que la inflación en enero alcanzó un 2,2% y se acumularon un 84,5% en el último año. En el Ministerio de Economía confirmaron la información y garantizaron que “desde el comienzo de esta gestión, Argentina comenzó a transitar un proceso de estabilización y desinflación basado en tres anclas: fiscal, monetaria y cambiaria”.
También destacaron que el país está en un proceso de desinflación, ya que la cifra que este jueves dio a conocer el INDEC representa “la inflación mensual más baja desde julio de 2020, y la menor para un mes de enero desde 2018″.
“Es el noveno mes consecutivo de desaceleración en la comparación contra igual mes del año anterior -indicaron-. A su vez, la inflación interanual a enero fue la menor desde septiembre de 2022″.
“La profundización del sendero de desinflación puede apreciarse también en el análisis de medias móviles de la variación del IPC, que permite extraer tendencias más allá de la volatilidad de muy corto plazo. En esta línea, la media móvil de 3 meses fue de 2,4% mensual (-0,2 p.p. vs. diciembre de 2024), el menor registro desde agosto de 2020, en tanto la de 6 meses fue de 2,9% mensual (-0,3 p.p. vs. diciembre de 2024), la menor variación desde noviembre de 2020″, detallaron desde la Cartera que lidera Luis Caputo.
Para el Gobierno, la disminución de la inflación ocurre en un escenario de aumento en la actividad económica y elevación en los ingresos de la población. Sobresalen los aumentos reales en diciembre del 18% en el salario medio del sector privado registrado (SIPA), del 12,8% en el beneficio jubilatorio y del 107% en la Asignación Universal por Hijo.
Además del número de inflación, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) señaló que el incremento más significativo de enero se registró en los sectores de restaurantes y hoteles (5,3%), debido a incrementos estacionales en el servicio hotelero. Sigue la división de vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (4,0%), debido a los aumentos en el alquiler de la vivienda y los costos asociados; así como electricidad, gas y otras drogas.
En cuanto a la división más prevalente en las regiones NEA, NOA, Pampeana y Patagonia, fue la alimentación y bebidas sin alcohol (1,8%), con incrementos en carnes y derivados, pan y cereales, así como en leche, productos lácteos y huevos. En Cuyo y Gran Buenos Aires, la incidencia más alta fue en establecimientos de comida y hoteles (5,3%).
De acuerdo con la información oficial, las dos áreas que mostraron las fluctuaciones más bajas en enero de 2025 fueron la educación (0,5%) y las prendas de vestir y calzado (-0,7%)). En términos de categorías, los regulados (2,6%) fueron los más altos, seguidos por el IPC núcleo (2,4%), mientras que los estacionales experimentaron un aumento del 0,6%.
Previo a la divulgación de la información, tanto el Gobierno como los expertos en análisis privados concordaron en que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) se situaría por debajo del 2,5%.
El último cálculo de expectativas de mercado (REM), llevado a cabo por el Banco Central, estimó que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de enero se situaría en un 2,3%. Adicionalmente, ciertas consultoras consultadas por TN señalaron que la inflación oscilaría entre el 2% y el 2,4%. Al final, alcanzó el 2,2%.
