Podrían autorizar también el denominado “take away” en el ámbito de la Ciudad.
Si bien en la Ciudad de Buenos Aires ya se anunció que el aislamiento obligatorio para evitar el avance del coronavirus se mantendrá sin modificaciones y no se permitirán las salidas recreativas, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, evalúa una flexibilización de la cuarentena dentro del sector gastronómico.
Sucede que actualmente y desde que comenzó la cuarentena, estos comercios permanecieron cerrados al público y solo pueden funcionar con el sistema de entrega a domicilio, pero sin recibir gente en sus establecimientos.
Para ayudar más a reactivar este sector golpeado por la situación actual, próximamente las autoridades de la Ciudad podrían autorizar también el denominado “take away”, en el cual las personas pueden hacer sus pedidos por teléfono o a través de aplicaciones y pasar a retirarlos por los locales una vez que ya están hechos, o bien ir hasta el lugar y hacer una orden pero para llevar.
“Hoy, la gastronomía sólo trabaja con los deliverys, entonces pensamos en ampliarlo para que se puede ir a comprar la comida”, adelantó el vicejefe de Gobierno local, Diego Santilli, en declaraciones radiales.
Según precisó Santilli, no habrá grandes cambios “hasta tanto se pueda hacer un análisis más extenso” de la evolución de los casos de coronavirus luego de la ampliación de las actividades exceptuadas del aislamiento que entró en vigencia la semana pasada y que derivó en una mayor circulación de personas en la calle.