El Gobierno porteño implementará un sistema de sensores para medir la frecuencia de las líneas A, B, E y H de subte.
Su suministro, instalación y mantenimiento fue adjudicado a la empresa Indra, que utilizará la tecnología de identificación por radiofrecuencia para verificar el paso de los trenes por las cabeceras. El propósito es medir y evaluar la calidad del servicio, en el marco de un nuevo contrato que contempla beneficios extra para la empresa concesionaria si supera los objetivos mínimos planteados.
La licitación fue llevada adelante por la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación, que depende del Ministerio de Educación e Innovación de la Ciudad. La implementación del sistemacostará $ 13.507.200.
El servicio incluirá el procesamiento en tiempo real y almacenamiento de los datos aportados por los sensores, que registrarán en cada cabecera el paso de cada formación con sus respectivos vagones. Al mismo tiempo, los reportes se enviarán a la base de datos de la Agencia de Sistemas de Información de la Ciudad.
El sistema medirá la frecuencia de paso de las formaciones y su composición. También se realizará el registro de actividad por coche. Para esto, se instalarán sensores de tecnología de identificación de radiofrecuencia en las estaciones cabecera Plaza de Mayo y San Pedrito, de la línea A; Alem y Rosas de la B; Bolívar, Virreyes y Retiro de la E, y Hospitales y Facultad de Derecho de la H.
Cada uno de los 703 coches de esas líneas tendrá una etiqueta adherida en el exterior. Así, a su paso por las cabeceras, la información de esas etiquetas será registrada en forma inalámbrica por los lectores de radiofrecuencia instalados en las estaciones, que serán 18.
La instalación del sistema comenzará en junio. Se trabajará en una línea por mes, por lo que en septiembre ya estará operativo en las cuatro incluidas en esta etapa.
En la línea D ya hay un sistema similar en funcionamiento, implementado por Metrovías. Y, según el Gobierno porteño, más adelante también lo instalarán en la línea C.
«Los pliegos de la nueva licitación del subte son superadores con respecto a los que dieron origen al servicio actual -explica Felipe Miguel, el jefe de Gabinete del Gobierno porteño-. Se alinean los objetivos de prestación de un mejor servicio con la remuneración que recibe el operador. El concesionario tiene que cumplir con un piso de frecuencia, pero si la mejora tiene bonificaciones. Para evaluar la prestación, hace falta saber cuántos kilómetros recorre cada formación en cada línea de subte y tener buenas mediciones de la frecuencia en cada horario del día. Con la instalación de un sistema de sensores, se apunta a eso, a evaluar y medir el servicio para que funcionen bien los incentivos previstos en el contrato».
Desde la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación agregan que, además, el sistema servirá para mejorar el predictivo que le anuncia a los pasajeros cuánto falta para que llegue el próximo subte. También anticipan que la idea es que la información esté disponible en la aplicación Cómo Llego del Gobierno de la Ciudad.