Tras la contundente victoria de La Libertad Avanza en las elecciones legislativas, Javier Milei confirmó este lunes el inicio de una nueva etapa en su programa económico. Con tono optimista, el mandatario aseguró que “se ha disipado fuertemente el riesgo de la vuelta del populismo” y destacó que el riesgo país cayó a 680 puntos, su nivel más bajo desde el inicio de su gestión.
Según explicó, la fuerte recuperación de los bonos argentinos (que subieron hasta un 20%) y el repunte de las acciones, con alzas de hasta el 50%, reflejan “la confianza del mercado en la continuidad del programa”.
“El riesgo país llegó a 1500 por el torpedeo de la política. Cuando eso pasa, se corta el crédito y cae la actividad. Hoy el mercado entiende que el rumbo es consistente”, sostuvo Milei en diálogo con A24.
Tres pilares para la nueva etapa
El Presidente delineó los tres ejes sobre los que se apoyará la fase que comienza: estabilidad financiera, consolidación fiscal y atracción de inversiones.
En este último punto, destacó el potencial del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), que ya concentra proyectos —aprobados y en trámite— por más de US$100.000 millones. El esquema ofrece beneficios impositivos y estabilidad regulatoria por 30 años para grandes capitales extranjeros y nacionales.
Además, Milei remarcó que los compromisos financieros de la Argentina están cubiertos hasta 2026, gracias al swap con Estados Unidos, recientemente acordado. “Tenemos el swap que garantiza que de acá hasta el final de este mandato la plata está, se use o no”, afirmó.
Caputo busca estabilizar el mercado cambiario
El ministro de Economía, Luis Caputo, será el encargado de poner en marcha la nueva hoja de ruta. En las próximas semanas, buscará revertir la volatilidad cambiaria de la etapa preelectoral, marcada por la intervención del Banco Central y la asistencia del Tesoro estadounidense para contener al dólar.
Con el escenario político despejado, el Gobierno espera que la demanda de divisas se reduzca y se convierta en oferta, a medida que las empresas y los particulares vuelvan a necesitar pesos para sus obligaciones.
Caputo también confirmó que se mantendrá el esquema de bandas cambiarias, iniciado en abril con un techo de $1400 y un ajuste del 1% mensual. Este lunes, el límite superior se ubicaba en $1494,04.
En paralelo, el Ministerio evalúa si será necesario activar el swap con EE.UU. por US$20.000 millones, e incluso negocia un préstamo adicional con bancos de Wall Street para cubrir vencimientos en 2025 y 2026.
Inversiones y privatizaciones: las apuestas para atraer capital
Con la estabilidad política y financiera como telón de fondo, el Ejecutivo apuesta a que el clima post electoral impulse la llegada de capitales. En los próximos meses se esperan desembolsos vinculados a proyectos del RIGI y el avance de nuevas privatizaciones.
Una de las pruebas clave será la licitación de las cuatro represas del Comahue, prevista para el 7 de noviembre. El Gobierno proyecta ingresos por US$500 millones, aunque en el sector estiman que las ofertas podrían superar los US$700 millones.
También está en carpeta la transferencia de concesiones de rutas bajo control estatal y otras iniciativas de participación público-privada.
“Las ventas se frenaron por el torpedeo de la política. Ahora el mercado responde: suben los bonos, las acciones… hay señales de estabilidad”, afirmó Milei, convencido de que la nueva fase económica marcará un punto de inflexión para su gestión.
