El primero en tomar la palabra fue el presidente de la Fundación El Libro, Alejandro Vaccaro. La virulencia no es su fuerte y por eso el tono de su discurso dejó pasmados a buena parte de los presentes. Es cierto que ha habido discursos iracundos, pero siempre era una libertad que se podía tomar en todo caso algún autor invitado. Esta vez, sonó en la voz de la máxima autoridad de la Feria: “El libro es cultura, y en momentos en los que se encuentra hackeada, atravesada por el intento de desfinanciamiento, la Feria se erige como un faro cultural en el medio de la oscuridad”, dijo apenas para comenzar.
Antes de este cruce, la Secretaría había desistido de participar con su stand tradicional argumentando que el costo de 300 millones de pesos era excesivo. Vaccaro retrucó que el alquiler era de 80 millones. Y para coronar el encadenamiento de polémicas, el presidente Javier Milei informó por redes sociales que presentará en la pista central de La Rural su nuevo libro Capitalismo, socialismo y la trampa neoclásica (Planeta).
Vaccaro retomó este punto: “El Presidente de la Nación, luego de despreciar nuestra Feria, no se sonroja y pide participar en este espacio, que está prevista para el próximo domingo 12 de mayo en la Pista Central de La Rural. Su presencia en la Feria, vidriera extraordinaria, implica una serie de erogaciones también extraordinarias, que la Fundación El Libro no puede afrontar. Se lo digo con una mano en el Corazón: No Hay Plata. Por lo tanto, todo lo atinente a su seguridad y de la gente que concurra a su evento correrá por su exclusiva cuenta, o lo que es peor, será un gasto extra para el Tesoro Nacional”, dijo Vaccaro y estalló una ovación que se repitió toda vez que sonaron cuestionamientos a la política oficial para el área de cultura.