El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, confirmó que la Ciudad registra «un descenso de casos de coronavirus con respecto a la semana anterior», una baja en el uso de camas generales en hospitales públicos y de personas en hoteles.
No obstante, el funcionario advirtió que no significa que la curva esté en descenso definitivo: “Ha pasado hace dos semanas y volvió a crecer por lo que diría de ser prudente. Hay que tener una mirada de mucha prudencia, de desandado paulatino y prudente y en base a ello vamos a seguir trabajando junto con la medición de evidencia de cómo van impactando los datos”, aseguró.
Por otro lado,el ministro de salud porteño insistió con el pedido de la donación de sangre para los procedimientos habituales como de plasma para el tratamiento de los enfermos de covid-19 en los hospitales y las cuatro postas ubicadas en los barrios de Belgrano, Caballito, Barracas y Montserrat.
“Tenemos todavía un camino por delante hasta la aparición de la vacuna, que tenemos que manejar inteligentemente con cada uno de nosotros como ciudadanos estemos dispuestos a aportar algo de nosotros. Tenemos que ir aprendiendo a manejarnos en cada semana epidemiológica de acuerdo a la situación epidemiológica de cada lugar, que es heterogénea en todo el país”, indicó.
Con respecto a las declaraciones del viceministro de Salud bonaerense sobre que es probable que haya muchos fallecidos que no se registren en el día debido a retrasos en la carga de datos, el funcionario aseveró que esta situación se dio en todos los países y que se trabaja en el “curado” de información para reacomodar las cifras.
Sobre la reanudación de las clases presenciales en la Ciudad, Quirós señaló que «hay 5.000 niños que perdieron el acompañamiento de la escuela» por la pandemia de coronavirus, a quienes «iremos a buscar casa por casa» para que recuperen ese vínculo.
«Para (retomar) los contenidos pedagógicos hay tiempo, otra cosa es la pérdida definitiva del espacio escolar. Tenemos claro que hay que hacer un esfuerzo extraordinario para identificar, contener y cuidar a los niños que perdieron el vínculo con la escuela», aseguró.