Por lo que señaló que “oponer a la Ciudad de Buenos Aires a las provincias de interior es una maniobra discursiva para hacer pasar el ajuste que prepara Alberto Fernández de la mano del FMI” y remarcó que “la reducción de fondos para la Ciudad no es para beneficiar a Santiago del Estero o Formosa, sino un reaseguro para la renegociación de la deuda usuraria que Fernández ya anunció, y que implicará nuevos ajustes contra el pueblo, tanto de CABA como del interior de país”.
“Es falso que los porteños sean privilegiados y que la Ciudad esté en buenas condiciones; si Fernández investigara un poco debiera saber que el 50% de los trabajadores de la Ciudad tienen salarios inferiores a los 25 mil pesos, cuando la canasta de pobreza es de 34 mil, que la pobreza trepó al 20% de la población, que crece la precarización laboral, que los colegios se caen a pedazos, que los alquileres son impagables y que 300 mil personas viven en villas miseria”, advirtió.
Asimismo advirtió que “el ajuste que ahora anuncia Fernández contra la Ciudad agravará esta situación, en beneficio exclusivo de la banca acreedora y los fondos de inversión que hacen jugosos negocios con la deuda pública argentina”.
Por otro lado, afirmó que “no hemos escuchado al candidato a jefe de gobierno del Frente de Todos, Matías Lammens, rechazar las declaraciones de Fernández” y concluyó aseverando que “este silencio no es nuevo, tampoco abrió la boca cuando Fernández acusó a los porteños de privilegiados. Es evidente que entre el pueblo de la Ciudad y el ajuste requerido por el FMI, Lammens opta por éste último”.
