La movida es organizada por el Sindicato de Conductores de Taxis, que en los últimos tiempos había dejado de lado la modalidad de protestar en la calle.
A casi cuatro años del desembarco de Uber en la Ciudad, los taxistas porteños vuelven a protestar en la calle. Este miércoles a las 10 se concentran en la avenida 9 de Julio y Lavalle, junto al Obelisco, para desde allí marchar a la sede central de la Afip, en Hipólito Yrigoyen al 300.
La movida es organizada por el Sindicato de Conductores de Taxis, que en los últimos tiempos había dejado de lado la modalidad de protestar en la calle. Lo explica José Ibarra, titular del gremio: «Realizamos todos los reclamos administrativos que estaban a nuestro alcance. Ante la Justicia, la Fiscalía, la Afip, el Enacom y el Gobierno de la Ciudad. Pero los tiempos legales se agotan y seguimos sin respuestas. Por eso volvemos a la calle, nuestro lugar natural de lucha.
La movilización se aprobó la semana pasada en una asamblea y forma parte de un plan de lucha con marchas mensuales. «Arrancamos movilizándonos a la Afip porque no se puede entender que Uber siga sin pagar impuestos. La propia agencia de recaudación reconoció que entre 2016 y 2017 Uber evadió unos 500 millones de pesos. Después iremos a la Legislatura, al Enacom, a donde haga falta para que nos escuchen», explica Ibarra.
Los taxistas apuntan contra todas las aplicaciones, pero especialmente contra Uber que es la que más creció desde que llegó a la Ciudad. Una de sus virtudes son las tarifas más económicas contra las que los taxistas no pueden competir. «Nosotros nos vemos obligados a subir las tarifas porque nos suben todos los costos -agrega Ibarra-. Mientras, ellos no pagan nada».